Desierto de Atacama inicia la construcción del mayor observatorio de rayos gamma del mundo.

En pleno desierto de Atacama, uno de los lugares con los cielos más limpios y oscuros del planeta, comenzó oficialmente la construcción del CTAO, el observatorio de rayos gamma más grande y potente del mundo. La instalación se ubicará en el Observatorio Paranal, en la Región de Antofagasta, consolidando a Chile como un polo estratégico de la astronomía mundial. El proyecto, impulsado por el Observatorio Europeo Austral (ESO), permitirá estudiar los fenómenos más extremos del universo, como agujeros negros, estrellas de neutrones y posibles señales asociadas a la materia oscura. Se trata, además, del primer observatorio de rayos gamma construido en Chile. El CTAO contará, una vez finalizado, con 60 telescopios distribuidos en una superficie de captación cercana al millón de metros cuadrados. Su objetivo será detectar rayos gamma de muy alta energía, que se generan en eventos cósmicos violentos y que, al interactuar con la atmósfera terrestre, producen la llamada radiación de Cherenkov, un brevísimo destello de luz azul. Según explicó el director general del ESO, Xavier Barcons, este hito no solo marca un avance científico de alcance global, sino que también refuerza el liderazgo de Chile en la observación astronómica. Se espera que los primeros telescopios del CTAO entren en funcionamiento antes de finales de 2026.Con este proyecto, el desierto de Atacama vuelve a posicionarse como una verdadera ventana al universo, aportando conocimiento clave para comprender el origen y comportamiento de las partículas cósmicas y los límites de la física moderna.