Un mensaje corto y desesperado enviado por uno de los sobrevivientes atrapados en el campamento Dickson reveló la cruda realidad que se vivía en el Parque Nacional Torres del Paine , mientras Chile se enfrentaba a la tragedia que cobró la vida de cinco turistas en el circuito de alta montaña. Este llamado de auxilio no fue un hecho aislado, sino una señal de alerta sobre la situación crítica en la que se encontraban los sobrevivientes. Además de los fallecidos, había personas heridas, mojadas, con frío extremo y en riesgo inminente de sufrir nuevas tragedias por inanición, hipotermia o caídas. El mensaje, enviado por Em Dong al grupo “Guías Torres del Paine”, se convirtió rápidamente en una pieza fundamental para comprender la precariedad y desamparo con los que los sobrevivientes enfrentaron la emergencia. Antes de ser rescatados, lograron llegar por sus propios medios desde el campamento Los Perros hasta Dickson, tras un intento fallido de cruzar el Paso John Gardner en condiciones climáticas extremas. “Todos estamos traumatizados, con frío… y nos estamos quedando sin comida ni suministros”, expresaba el mensaje desde la montaña. También se mencionaba que si alguien hubiese tenido heridas graves, “habría muerto en la montaña”. El relato confirma que el grupo no solo estaba asustado, sino que su vida corría peligro. En medio de esta crisis, surge una denuncia que ha generado controversia a nivel nacional: acusaban a CONAF y a Vértice, operador de campamentos, de haber sido “deliberadamente obstructivos” con aquellos que intentaban evacuar . Los sobrevivientes también afirmaron que: La frase “solo queremos salir” resume el nivel de desesperación que experimentaban aquellos que luchaban por mantenerse con vida. La presión generada por este llamado, junto con las alertas emitidas por dispositivos satelitales y publicaciones en redes sociales, finalmente aceleró la operación aérea. Pasadas las 14:00 horas del miércoles, la Sección Aérea de Carabineros llevó a cabo la evacuación: cuatro sobrevivientes fueron trasladados al Hospital de Puerto Natales, mientras que los cuerpos de los cinco fallecidos también fueron recuperados. En el hospital, el director Ignacio Quiroz confirmó que los sobrevivientes —dos australianos, un estadounidense y un chileno— estaban fuera de peligro vital, aunque presentaban evidente shock emocional. Fuente: Publimetro
La tragedia que dejó cinco turistas fallecidos en el Parque Nacional Torres del Paine ha desencadenado una serie de acusaciones por parte de la Asociación de Hoteles y Servicios Turísticos de Torres del Paine (HYST). En un comunicado contundente, la asociación señala tres décadas de abandono estatal, negligencias acumuladas y una estructura pública que consideran no apta para administrar un destino de clase mundial. El gremio apunta directamente al Estado como responsable de lo sucedido en el circuito Macizo Paine “O”, donde ocurrió la tragedia. Según HYST, la falta de guardaparques en terrenos críticos, la ausencia de monitoreo y una estructura obsoleta para enfrentar emergencias en alta montaña son los verdaderos motivos detrás del incidente. En palabras del comunicado, El peligro es un Estado ausente, rechazando propuestas como la imposición de guías obligatorios o nuevas restricciones, que consideran no abordan el problema de fondo. El gremio también critica a CONAF, a quien describen como un organismo con herramientas anticuadas, escasos recursos y sin planes de manejo actualizados para gestionar un parque que recibe más de 300 mil visitantes al año. Además, denuncian que muchos guardaparques realizan labores administrativas en lugar de proteger las áreas críticas. HYST asegura haber presentado propuestas concretas durante años para reducir los riesgos actuales, pero se han visto obstaculizadas por la burocracia y la falta de modernización en la gestión estatal. El gremio insiste en que no busca culpables individuales, sino corregir un sistema completo para evitar futuras tragedias. Además, destacan que los concesionarios turísticos no tienen autoridad legal para controlar accesos o detener a visitantes, por lo que trasladarles la responsabilidad sería injusto. Para HYST, esta tragedia debe ser un punto de inflexión para el parque nacional. Advierten que si no se corrigen las fallas estructurales, el parque seguirá operando bajo una institucionalidad frágil e incapaz de responder a emergencias o adaptarse al desarrollo turístico global. En resumen, el gremio concluye: El turismo no destruye parques. El turismo los hace posibles. Fuente: Publimetro
Una fuerte emergencia se vive en el Parque Nacional Torres del Paine tras el grave incidente que afectó a tres turistas que realizaban el exigente circuito “O”, en el sector de Los Perros, región de Magallanes. El evento ocurrió el lunes 17 de noviembre, cuando un brusco cambio en las condiciones meteorológicas dejó a los excursionistas atrapados en medio de un violento temporal. Según los reportes oficiales, durante la tarde se registraron intensas nevadas y ráfagas de viento que alcanzaron los 193 km/h, condiciones que rápidamente transformaron la travesía en una situación de alto riesgo, especialmente en las zonas cercanas al Paso John Gardner, uno de los puntos más complejos del recorrido por su altitud y variabilidad climática. La Corporación Nacional Forestal (CONAF) activó un operativo de emergencia al confirmar que una de las personas — un turista de nacionalidad mexicana— fue encontrado sin vida tras el impacto del temporal. Junto a él, una excursionista de nacionalidad coreana logró ser rescatada con signos de hipotermia severa y trasladada de urgencia al Hospital de Puerto Natales, donde permanece en estado grave. La tercera integrante del grupo, una ciudadana británica, continúa desaparecida. Su búsqueda se ha transformado en la prioridad de las autoridades, aunque los esfuerzos se ven dificultados por el terreno escarpado y las persistentes condiciones meteorológicas adversas que afectan la zona. Ante la magnitud del incidente, CONAF, el Comité de Emergencia Provincial y la Delegación Presidencial Provincial de Última Esperanza decretaron el cierre temporal del tramo entre los campamentos Dickson y Paso, con el fin de facilitar las labores de rastreo y evitar nuevos riesgos para los visitantes. Carabineros y unidades especializadas del Ejército, incluidas brigadas de alta montaña PARME, fueron movilizadas para reforzar las labores de búsqueda. El delegado presidencial provincial informó que las acciones intensivas comenzarán “a primeras horas de este martes 18 de noviembre”, debido al peligro que implica operar de noche en el área. “Veremos cómo se ha dado el rescate de esta persona que está herida; la siguiente acción, por supuesto, es dar con el paradero de la persona desaparecida y la extracción del fallecido”, señaló la autoridad, según recogió T13. Las labores continuarán durante la jornada, en medio de un operativo que mantiene en alerta a la región y al personal del parque, uno de los destinos más visitados de Chile. Fuente: Publimetro
Un mensaje corto y desesperado enviado por uno de los sobrevivientes atrapados en el campamento Dickson reveló la cruda realidad que se vivía en el Parque Nacional Torres del Paine , mientras Chile se enfrentaba a la tragedia que cobró la vida de cinco turistas en el circuito de alta montaña. Este llamado de auxilio no fue un hecho aislado, sino una señal de alerta sobre la situación crítica en la que se encontraban los sobrevivientes. Además de los fallecidos, había personas heridas, mojadas, con frío extremo y en riesgo inminente de sufrir nuevas tragedias por inanición, hipotermia o caídas. El mensaje, enviado por Em Dong al grupo “Guías Torres del Paine”, se convirtió rápidamente en una pieza fundamental para comprender la precariedad y desamparo con los que los sobrevivientes enfrentaron la emergencia. Antes de ser rescatados, lograron llegar por sus propios medios desde el campamento Los Perros hasta Dickson, tras un intento fallido de cruzar el Paso John Gardner en condiciones climáticas extremas. “Todos estamos traumatizados, con frío… y nos estamos quedando sin comida ni suministros”, expresaba el mensaje desde la montaña. También se mencionaba que si alguien hubiese tenido heridas graves, “habría muerto en la montaña”. El relato confirma que el grupo no solo estaba asustado, sino que su vida corría peligro. En medio de esta crisis, surge una denuncia que ha generado controversia a nivel nacional: acusaban a CONAF y a Vértice, operador de campamentos, de haber sido “deliberadamente obstructivos” con aquellos que intentaban evacuar . Los sobrevivientes también afirmaron que: La frase “solo queremos salir” resume el nivel de desesperación que experimentaban aquellos que luchaban por mantenerse con vida. La presión generada por este llamado, junto con las alertas emitidas por dispositivos satelitales y publicaciones en redes sociales, finalmente aceleró la operación aérea. Pasadas las 14:00 horas del miércoles, la Sección Aérea de Carabineros llevó a cabo la evacuación: cuatro sobrevivientes fueron trasladados al Hospital de Puerto Natales, mientras que los cuerpos de los cinco fallecidos también fueron recuperados. En el hospital, el director Ignacio Quiroz confirmó que los sobrevivientes —dos australianos, un estadounidense y un chileno— estaban fuera de peligro vital, aunque presentaban evidente shock emocional. Fuente: Publimetro
La tragedia que dejó cinco turistas fallecidos en el Parque Nacional Torres del Paine ha desencadenado una serie de acusaciones por parte de la Asociación de Hoteles y Servicios Turísticos de Torres del Paine (HYST). En un comunicado contundente, la asociación señala tres décadas de abandono estatal, negligencias acumuladas y una estructura pública que consideran no apta para administrar un destino de clase mundial. El gremio apunta directamente al Estado como responsable de lo sucedido en el circuito Macizo Paine “O”, donde ocurrió la tragedia. Según HYST, la falta de guardaparques en terrenos críticos, la ausencia de monitoreo y una estructura obsoleta para enfrentar emergencias en alta montaña son los verdaderos motivos detrás del incidente. En palabras del comunicado, El peligro es un Estado ausente, rechazando propuestas como la imposición de guías obligatorios o nuevas restricciones, que consideran no abordan el problema de fondo. El gremio también critica a CONAF, a quien describen como un organismo con herramientas anticuadas, escasos recursos y sin planes de manejo actualizados para gestionar un parque que recibe más de 300 mil visitantes al año. Además, denuncian que muchos guardaparques realizan labores administrativas en lugar de proteger las áreas críticas. HYST asegura haber presentado propuestas concretas durante años para reducir los riesgos actuales, pero se han visto obstaculizadas por la burocracia y la falta de modernización en la gestión estatal. El gremio insiste en que no busca culpables individuales, sino corregir un sistema completo para evitar futuras tragedias. Además, destacan que los concesionarios turísticos no tienen autoridad legal para controlar accesos o detener a visitantes, por lo que trasladarles la responsabilidad sería injusto. Para HYST, esta tragedia debe ser un punto de inflexión para el parque nacional. Advierten que si no se corrigen las fallas estructurales, el parque seguirá operando bajo una institucionalidad frágil e incapaz de responder a emergencias o adaptarse al desarrollo turístico global. En resumen, el gremio concluye: El turismo no destruye parques. El turismo los hace posibles. Fuente: Publimetro
Una fuerte emergencia se vive en el Parque Nacional Torres del Paine tras el grave incidente que afectó a tres turistas que realizaban el exigente circuito “O”, en el sector de Los Perros, región de Magallanes. El evento ocurrió el lunes 17 de noviembre, cuando un brusco cambio en las condiciones meteorológicas dejó a los excursionistas atrapados en medio de un violento temporal. Según los reportes oficiales, durante la tarde se registraron intensas nevadas y ráfagas de viento que alcanzaron los 193 km/h, condiciones que rápidamente transformaron la travesía en una situación de alto riesgo, especialmente en las zonas cercanas al Paso John Gardner, uno de los puntos más complejos del recorrido por su altitud y variabilidad climática. La Corporación Nacional Forestal (CONAF) activó un operativo de emergencia al confirmar que una de las personas — un turista de nacionalidad mexicana— fue encontrado sin vida tras el impacto del temporal. Junto a él, una excursionista de nacionalidad coreana logró ser rescatada con signos de hipotermia severa y trasladada de urgencia al Hospital de Puerto Natales, donde permanece en estado grave. La tercera integrante del grupo, una ciudadana británica, continúa desaparecida. Su búsqueda se ha transformado en la prioridad de las autoridades, aunque los esfuerzos se ven dificultados por el terreno escarpado y las persistentes condiciones meteorológicas adversas que afectan la zona. Ante la magnitud del incidente, CONAF, el Comité de Emergencia Provincial y la Delegación Presidencial Provincial de Última Esperanza decretaron el cierre temporal del tramo entre los campamentos Dickson y Paso, con el fin de facilitar las labores de rastreo y evitar nuevos riesgos para los visitantes. Carabineros y unidades especializadas del Ejército, incluidas brigadas de alta montaña PARME, fueron movilizadas para reforzar las labores de búsqueda. El delegado presidencial provincial informó que las acciones intensivas comenzarán “a primeras horas de este martes 18 de noviembre”, debido al peligro que implica operar de noche en el área. “Veremos cómo se ha dado el rescate de esta persona que está herida; la siguiente acción, por supuesto, es dar con el paradero de la persona desaparecida y la extracción del fallecido”, señaló la autoridad, según recogió T13. Las labores continuarán durante la jornada, en medio de un operativo que mantiene en alerta a la región y al personal del parque, uno de los destinos más visitados de Chile. Fuente: Publimetro