La próxima edición del Super Bowl promete ser histórica tanto en el ámbito musical como en la trayectoria de este esperado evento de la NFL. El reconocido cantante puertorriqueño Bad Bunny ha sido seleccionado para encabezar el espectáculo de medio tiempo con su actuación. PUBLICIDAD No obstante, la participación de Bad Bunny ha generado controversia, ya que el artista ha decidido excluir a Estados Unidos de su gira mundial, argumentando preocupaciones sobre las políticas de deportación implementadas por el gobierno estadounidense. El cantante expresó su temor a que sus seguidores latinos puedan enfrentar persecución o detención simplemente por asistir a sus conciertos, lo que justifica su elección de no realizar presentaciones en el país, salvo por este evento especial en el Super Bowl. Las advertencias sobre el operativo de control migratorio en el Super Bowl han ido en aumento en los últimos días. Tras la decisión de Bad Bunny de excluir a Estados Unidos de su gira, se ha avivado el debate sobre este tema, especialmente después de las declaraciones del asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Corey Lewandowski : No hay ningún lugar donde se pueda brindar refugio a quienes se encuentran en este país ilegalmente. Ni en el Super Bowl ni en ningún otro lugar. Los encontraremos y los deportaremos, advirtió Lewandowski. Ante estas afirmaciones, el funcionario anunció que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) estará presente durante la presentación de Bad Bunny, programada para el 8 de febrero en el Levi’s Stadium de Santa Clara, California. Según la autoridad, las leyes migratorias se aplicarán con la misma rigurosidad que se ha mantenido hasta ahora, convirtiendo el evento en un operativo con alto control en materia migratoria. Fuente: Publimetro
Estados Unidos ha mantenido una histórica mirada sobre América Latina a lo largo del Siglo XX, ejerciendo un intervencionismo explícito en la región. La potencia mundial ha tratado a los países al sur de su frontera como su patio trasero, interviniendo en territorios, promoviendo golpes de Estado, respaldando dictaduras militares y estableciendo su hegemonía en la región. En las últimas semanas, Estados Unidos y Venezuela han estado inmersos en una confrontación directa que ha involucrado el despliegue de buques estadounidenses con miles de soldados en el Mar Caribe. Un ataque por parte de Washington resultó en la muerte de 11 terroristas pertenecientes a la banda transnacional conocida como 'Tren de Aragua', originaria de Venezuela. Ambas partes han desplegado efectivos militares en aguas caribeñas y se han acusado mutuamente con dureza. Mientras Washington afirma que su objetivo es combatir el narcotráfico, Caracas denuncia esta situación como la mayor amenaza continental en un siglo para su territorio. A pesar de la aparente calma actual, la situación podría cambiar rápidamente, como es común en este tipo de confrontaciones internacionales. LAS CLAVES 14 de agosto: Estados Unidos ordena despliegue militar en el sur del Mar Caribe. 19 de agosto: Más de 4.000 soldados estadounidenses son desplegados cerca de Venezuela en el Mar Caribe a bordo de los barcos USS Gravely, USS Jason Dunham y USS Sampson, todos equipados con misiles guiados. 23 de agosto: Miles de venezolanos simpatizantes del chavismo se registran en la Milicia Nacional Bolivariana (MNB). 26 de agosto: Washington aumenta la presión con el despliegue del USS Lake Erie y del USS Newport News. 26 de agosto: Venezuela anuncia su propio despliegue militar en el Caribe. 2 de septiembre: Estados Unidos lleva a cabo un ataque que resulta en la muerte de 11 terroristas cerca de las costas venezolanas. 3 de septiembre: El secretario de Defensa de EE. UU., Pete Hegseth, advierte a Maduro que debería estar preocupado. 4 de septiembre: El secretario de Estado Marco Rubio acusa a Maduro de ser un narcotraficante, un terrorista. 5 de septiembre: EE. UU. denuncia que dos aviones militares venezolanos realizaron una maniobra altamente provocadora cerca de un buque estadounidense. Trump advierte sobre posibles consecuencias. ENTREVISTA Para profundizar en el tema, se entrevistó al analista político David Saucedo. MWN: ¿Consideras que una intervención militar directa de Estados Unidos en Venezuela es probable? Es posible, pero improbable. En todo caso, habría que pensar en las posibilidades de una intervención. En cierta forma, estamos acostumbrados por parte de Estados Unidos a una invasión como tal, con tropas desembarcando y apoderándose de instituciones, derrocando a un líder, etc. En América Latina, lo vimos en Panamá en 1989. Pero hay otros esquemas de intervención, como se vio en Chile en los años setenta, con Estados Unidos apoyando a opositores internos para derrocar a un líder e instalar un gobierno afín a sus intereses. Yo creo que en Venezuela veremos acciones híbridas contra el régimen de Nicolás Maduro, con más ataques a lanchas rápidas, el hundimiento de navíos que presuntamente transportan sustancias ilícitas, posiblemente el derribo de aeronaves y quizás la captura de narcotraficantes o dirigentes de alto perfil. MWN: ¿Estamos regresando a una nueva era de intervencionismo estadounidense en la región? Trump quiere enemigos a quienes confrontar, sobre todo viniendo de varios fracasos en el escenario internacional, como en Ucrania y Oriente Medio. Venezuela le parece un objetivo a modo para las embestidas norteamericanas, por lo que una guerra de desgaste parece ser una buena opción para que Trump gane puntos a costa de Maduro. MWN: Los países han pedido cautela sin criticar mucho a Estados Unidos ni defender mucho a Venezuela. ¿Crees que han reaccionado adecuadamente? Yo creo que deberían responder con más determinación ante un evidente intento intervencionista. No se puede justificar bajo ningún argumento una violación a la soberanía de un país y hay otros países que podrían enfrentar situaciones similares a las venezolanas. Sin embargo, no se puede legitimar ninguna intervención militar bajo el pretexto de la lucha contra las drogas. Es una problemática que se tiene que combatir en conjunto. MWN: ¿Qué mensaje manda Estados Unidos con su despliegue militar? En realidad el mensaje lo mandó hace mucho tiempo. Trump ha sido muy transparente desde que era candidato para volver a convertirse en presidente. Y más allá del uso excesivo del lenguaje beligerante, no ha mentido sobre sus decisiones para priorizar los intereses estadounidenses sobre todo lo demás e incluso lanzar amenazas sobre el uso legítimo o ilegítimo del poder para lograr sus objetivos. Hay que reconocer que Trump no ha mentido y ha sido transparente y honesto sobre sus objetivos políticos exteriores como ha sido evidente con los aranceles y otros aspectos. Para finalizar no creo que los norteamericanos se retiren sin lograr más trofeos ya que eso iría contra su naturaleza. Fuente: Publimetro
La próxima edición del Super Bowl promete ser histórica tanto en el ámbito musical como en la trayectoria de este esperado evento de la NFL. El reconocido cantante puertorriqueño Bad Bunny ha sido seleccionado para encabezar el espectáculo de medio tiempo con su actuación. PUBLICIDAD No obstante, la participación de Bad Bunny ha generado controversia, ya que el artista ha decidido excluir a Estados Unidos de su gira mundial, argumentando preocupaciones sobre las políticas de deportación implementadas por el gobierno estadounidense. El cantante expresó su temor a que sus seguidores latinos puedan enfrentar persecución o detención simplemente por asistir a sus conciertos, lo que justifica su elección de no realizar presentaciones en el país, salvo por este evento especial en el Super Bowl. Las advertencias sobre el operativo de control migratorio en el Super Bowl han ido en aumento en los últimos días. Tras la decisión de Bad Bunny de excluir a Estados Unidos de su gira, se ha avivado el debate sobre este tema, especialmente después de las declaraciones del asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Corey Lewandowski : No hay ningún lugar donde se pueda brindar refugio a quienes se encuentran en este país ilegalmente. Ni en el Super Bowl ni en ningún otro lugar. Los encontraremos y los deportaremos, advirtió Lewandowski. Ante estas afirmaciones, el funcionario anunció que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) estará presente durante la presentación de Bad Bunny, programada para el 8 de febrero en el Levi’s Stadium de Santa Clara, California. Según la autoridad, las leyes migratorias se aplicarán con la misma rigurosidad que se ha mantenido hasta ahora, convirtiendo el evento en un operativo con alto control en materia migratoria. Fuente: Publimetro
Estados Unidos ha mantenido una histórica mirada sobre América Latina a lo largo del Siglo XX, ejerciendo un intervencionismo explícito en la región. La potencia mundial ha tratado a los países al sur de su frontera como su patio trasero, interviniendo en territorios, promoviendo golpes de Estado, respaldando dictaduras militares y estableciendo su hegemonía en la región. En las últimas semanas, Estados Unidos y Venezuela han estado inmersos en una confrontación directa que ha involucrado el despliegue de buques estadounidenses con miles de soldados en el Mar Caribe. Un ataque por parte de Washington resultó en la muerte de 11 terroristas pertenecientes a la banda transnacional conocida como 'Tren de Aragua', originaria de Venezuela. Ambas partes han desplegado efectivos militares en aguas caribeñas y se han acusado mutuamente con dureza. Mientras Washington afirma que su objetivo es combatir el narcotráfico, Caracas denuncia esta situación como la mayor amenaza continental en un siglo para su territorio. A pesar de la aparente calma actual, la situación podría cambiar rápidamente, como es común en este tipo de confrontaciones internacionales. LAS CLAVES 14 de agosto: Estados Unidos ordena despliegue militar en el sur del Mar Caribe. 19 de agosto: Más de 4.000 soldados estadounidenses son desplegados cerca de Venezuela en el Mar Caribe a bordo de los barcos USS Gravely, USS Jason Dunham y USS Sampson, todos equipados con misiles guiados. 23 de agosto: Miles de venezolanos simpatizantes del chavismo se registran en la Milicia Nacional Bolivariana (MNB). 26 de agosto: Washington aumenta la presión con el despliegue del USS Lake Erie y del USS Newport News. 26 de agosto: Venezuela anuncia su propio despliegue militar en el Caribe. 2 de septiembre: Estados Unidos lleva a cabo un ataque que resulta en la muerte de 11 terroristas cerca de las costas venezolanas. 3 de septiembre: El secretario de Defensa de EE. UU., Pete Hegseth, advierte a Maduro que debería estar preocupado. 4 de septiembre: El secretario de Estado Marco Rubio acusa a Maduro de ser un narcotraficante, un terrorista. 5 de septiembre: EE. UU. denuncia que dos aviones militares venezolanos realizaron una maniobra altamente provocadora cerca de un buque estadounidense. Trump advierte sobre posibles consecuencias. ENTREVISTA Para profundizar en el tema, se entrevistó al analista político David Saucedo. MWN: ¿Consideras que una intervención militar directa de Estados Unidos en Venezuela es probable? Es posible, pero improbable. En todo caso, habría que pensar en las posibilidades de una intervención. En cierta forma, estamos acostumbrados por parte de Estados Unidos a una invasión como tal, con tropas desembarcando y apoderándose de instituciones, derrocando a un líder, etc. En América Latina, lo vimos en Panamá en 1989. Pero hay otros esquemas de intervención, como se vio en Chile en los años setenta, con Estados Unidos apoyando a opositores internos para derrocar a un líder e instalar un gobierno afín a sus intereses. Yo creo que en Venezuela veremos acciones híbridas contra el régimen de Nicolás Maduro, con más ataques a lanchas rápidas, el hundimiento de navíos que presuntamente transportan sustancias ilícitas, posiblemente el derribo de aeronaves y quizás la captura de narcotraficantes o dirigentes de alto perfil. MWN: ¿Estamos regresando a una nueva era de intervencionismo estadounidense en la región? Trump quiere enemigos a quienes confrontar, sobre todo viniendo de varios fracasos en el escenario internacional, como en Ucrania y Oriente Medio. Venezuela le parece un objetivo a modo para las embestidas norteamericanas, por lo que una guerra de desgaste parece ser una buena opción para que Trump gane puntos a costa de Maduro. MWN: Los países han pedido cautela sin criticar mucho a Estados Unidos ni defender mucho a Venezuela. ¿Crees que han reaccionado adecuadamente? Yo creo que deberían responder con más determinación ante un evidente intento intervencionista. No se puede justificar bajo ningún argumento una violación a la soberanía de un país y hay otros países que podrían enfrentar situaciones similares a las venezolanas. Sin embargo, no se puede legitimar ninguna intervención militar bajo el pretexto de la lucha contra las drogas. Es una problemática que se tiene que combatir en conjunto. MWN: ¿Qué mensaje manda Estados Unidos con su despliegue militar? En realidad el mensaje lo mandó hace mucho tiempo. Trump ha sido muy transparente desde que era candidato para volver a convertirse en presidente. Y más allá del uso excesivo del lenguaje beligerante, no ha mentido sobre sus decisiones para priorizar los intereses estadounidenses sobre todo lo demás e incluso lanzar amenazas sobre el uso legítimo o ilegítimo del poder para lograr sus objetivos. Hay que reconocer que Trump no ha mentido y ha sido transparente y honesto sobre sus objetivos políticos exteriores como ha sido evidente con los aranceles y otros aspectos. Para finalizar no creo que los norteamericanos se retiren sin lograr más trofeos ya que eso iría contra su naturaleza. Fuente: Publimetro